En
el año 1983, en el marco del Segundo
Encuentro de Organizaciones y Movimientos de América realizado en Tiahuanacu, Bolivia instituyó el 5 de septiembre como el Día Internacional de la Mujer
Indígena, en homenaje a Bartolina Sisa,
una valerosa mujer quechua que luchó en la rebelión anticolonial con Tupac
Katari en el Alto Perú.
Se
cree que Bartolina nació el 25 de agosto de 1750 en la provincia Loayza del
departamento de La Paz.
Hija de José Sisa y Josefa Vargas, originarios
del Alto Perú, que vivían del comercio de
coca y de telas para liberarse del sometimiento al que
estaban condenados todos los pueblos originarios de esas tierras. Bartolina adquirió experiencia en el rubro del comercio, logrando
independizarse a los 19 años. Comienzó, asi, a recorrer su tierra comerciando.
La situación que observa, genera en
ella, una convicción de protesta contra ese sistema colonialista de
explotación.
Julián
Apaza , que luego se convertiría en el esposo de Bartolina , también fue parte
del comercio de la coca, luego de estar dos años en el trabajo forzado en la
mita en las minas de Oruro. En uno de sus tantos viajes y frecuentando los
mismos lugares, se conocieron.
Bartolina
es descripta por algunos historiadores como una mujer aguerrida que dominaba el fusil. Sabía montar caballo, era joven y de
piel morena, atractiva, esbelta, de ojos negros y muy inteligente. Julián era un hombre de buenas condiciones físicas y
también con una inteligencia notable. Pertenecían a la etnia aymará.
En
1772, ya casados, tuvieron el primero de sus cuatro hijos (tres varones y una
niña). El primer hijo fue capturado en
Perú, en 1783, y se cree que posteriormente fue asesinado. Los otros llegaron a
sobrevivir pero debieron cambiar sus nombres y apellidos.
En
marzo de 1781 Julián inició un levantamiento contra el Imperio español y cambio
su nombre por el de Tupac Katari, en
homenaje a Tupac Amaru y a Tomás Atari, un cacique local. Formó un ejército de
cuarenta mil hombres y cercó dos veces a
la ciudad de La Paz. Este levantamiento
indígena de finales del siglo XVIII fue el más extenso geográficamente y con
más apoyo. Tomó dos años al colonialismo español sofocarlo.
Bartolina
desde el primer momento, tomó posiciones en la lucha armada, contando con la
total obediencia de los indígenas sublevados.
Antes
del cerco a La Paz, rumbo a la liberación del pueblo, se nombró a Túpac Katari, Virrey del Inca y a Bartolina,
virreina. Con ese título, Bartolina organizó diferentes campamentos militares
en el territorio del Alto Perú. La
táctica de lucha era el cerco. Los indígenas tenían superioridad numérica y los
españoles las armas de fuego. Estos al enterarse que había grupos comandados
por una mujer redoblaron sus esfuerzos para derrotarla. Sin embargo Bartolina logró resistir.
Después
de tres meses de cerco y sin provisiones, el ejército español comenzó a
debilitarse por hambre, y la Real Audiencia de Charcas, al enterarse, envía
1.700 hombres en su ayuda.
El
30 de junio, los ejércitos indios se replegaron sin oponer resistencia y los
españoles empezaron a instigar a la traición y a ofrecerles el indulto si
entregaban o delataban a los cabecillas.
De
esa manera Bartolina es traicionada ya que algunos de sus acompañantes que
habían hecho contacto con los españoles la delatan. La toman presa y comunican
que le van a otorgar un indulto pero finalmente no fue concedido. En prisión fue torturada y
humillada para obtener información. Pese a las agresiones, no reveló ningún dato.
En
tanto seguía la lucha. Tupac intentó
liberar a Bartolina a través de varios medios, tanto bélicos como pacíficos.
Ofreció intercambiarla por distintas personas e incluso por él mismo. Bartolina
fue utilizada como carnada para tratar de capturar a Tupac.
Finalmente, llegó un ejercito de 7.000 hombres
desde Buenos Aires, para romper el cerco de Tupac.La batalla fue encarnizada,
pero la superioridad en armas hizo que Túpac se replegara. Posteriormente fue apresado
por la traición de un primo de Bartolina, Tomás Inca Lipe, que era su
más apreciado y cercano colaborador.
El
14 de noviembre, Bartolina Sisa fue obligada a presenciar el descuartizamiento
público de Túpac Katari en la plaza de Peñas.
Muerte de Bartolina.
Después
de casi un año de encierro, se pronunció la sentencia de muerte contra ella.
La
sentencia colonizadora expresaba: "A Bartolina Sisa Mujer del Feroz Julián
Apaza o Tupac Katari, en pena ordinaria de Suplicio, que sea sacada del Cuartel
a la Plaza mayor atada a la cola de un Caballo, con una soga al Cuello y
plumas, un aspa afianzada sobre un bastón de palo en la mano y conducida por la
voz del pregonero a la Horca hasta que muera, y después se clave su cabeza y
manos en Picotas con el rótulo correspondiente, para el escarmiento público en
los lugares de Cruzpata, Alto de San Pedro, y Pampajasi donde estaba acampada y
presidía sus juntas sediciosas; y después de días se conduzca la cabeza a los
pueblos de Ayo-ayo y Sapahagui en la Provincia de Sica-sica, con orden para que
se quemen después de un tiempo y se arrojen las cenizas al aire, donde estime
convenir".
Y
a esta sentencia insobornable la cumplieron los verdugos con gran eficiencia y
su martirio de flagelos, violaciones y puntapiés regaron esa tierra que tanto amó, la
exhibieron desnuda sobre un burro en la plaza colonial y luego ahorcada y
descuartizada, mostraron su cabeza enclavada en la punta de una picota,
"para escarmiento de los indios" y sus extremidades fueron enviadas a
distintos lugares del Perú para acallar las voces de los pueblos originarios.
Ese vano intento por ocultar el espíritu
soberano e independiente, sigue aún vigente y palpitante en la memoria
colectiva de un pueblo, en su raza y en su sangre.
En el universo.
Tan
presente se encuentran que el 20 de diciembre de 2013 desde la gestión del
presidente de Bolivia, Evo Morales, se lanzó desde China el Primer satélite de
comunicaciones boliviano llamado Tupac Katari, y el próximo en enviarse al
espacio se llamará Bartolina Sisa.
Más de 200 años después Tupac y
Bartolina seguirán presentes en la memoria del antiguo Alto Perú y de toda
America, para desde aquel lugar del
universo continuar siendo una parte indispensable de la construcción de un
mundo sin colonialismo ni esclavitud.
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Gracias, no conocía la historia tan interesante.Pueden borrar, torturar, desplazar.., pero no pueden evitar que siempre surja el deseo de libertad e igualdad.Se olvidaron que las cenizas al viento..., germinaron en otros ; aunque sea mucho tiempo después.... las ideas florecen....
ResponderEliminarGracias, Alejandro, esto de buscar historias interesantes para publicar, me posibilitó, encontrar estas joyas que se encuentran muy ocultas en nuestra historia oficial.
ResponderEliminarPor nuestros libros de Historia conocí la figura excelsa de Tupac Katari, pero no, o no recordaba a su esposa Bartolina Sisa...
ResponderEliminarGracias Laura.
Lucho, en aquellos siglos lo que luego fueron nuestros países estaba muy relacionados. Esto ocurrió en la actual Bolivia, pero la lucha de los americanos contra el español es continental. A mi tampoco me enseñaron en el colegio acerca de Tupac o Bartolina. Mucha Edad Media europea, eso si.
ResponderEliminarMe gusta conocer algo de la historia de América. Yo conozco muy poco de la historia de los indígenas.
ResponderEliminarGracias Oliva, por interesarte. Si te interesa no ficción en cualquier libro de Historia Latinoamericana. Te recomiendo Las venas abiertas de América Latina.
ResponderEliminarGracias por difundir y contribuir a formar conciencias.
ResponderEliminarMuchas gracias Liliana por leerlo y comentar.
ResponderEliminar¡Qué mujer más impresionante! Hace poco leí sobre ella y me fascinó. Es toda una heroína y un ejemplo de mujer. ¡Saludooos!
ResponderEliminarGracias Mayra por pasarte por el blog ! Gracias por leerme! Saludos !
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