Memoria de dos
mundos de María Bamberg.
La posibilidad de interactuar en distintos
grupos de lectores siempre provoca buenas experiencias. Un grupo español del
que participo, organizó para fin de año
un juego del amigo invisible con los integrantes de cada país. Me tocó
regalarle a una amiga de San Fernando y
desde Lincoln salió para allí una caja
con distintos regalitos y recuerdos. Elegí regalarle un libro de Isabel
Allende, ya que es una escritora que generalmente gusta a muchos lectores. Por
mi parte, días después recibí una caja que venía de Villa Constitución, Pcia de
Santa Fe. Realmente mi amiga de allí, se superó. Muchas sorpresas lindas y
entre ellas el hermoso libro Memorias de dos mundos de María Bamberg.
Yo no conocía a María Bamberg. Me enteré que
había escrito un libro anterior convertido en best seller, basado en cartas
de su madre, titulado Allá en la Patagonia. Seguramente en un tiempo cercano lo
buscaré y lo leeré.
En este libro de sus memorias, Maria no cuenta epopeyas increíbles, cuenta
de un modo ameno y entrañable la vida de
una familia alemana inmigrante en la
Patagonia
De
Alemania a la Patagonia.
María Brunswig ( de casada, Bamberg ) nació
en Alemania en 1915 pero se crió en la Patagonia argentina, porque su padre, el
oficial de marina Hermann Brunswig, que en 1918, después de la Gran guerra lo
perdió todo, recibió una propuesta de trabajo para establecerse en una estancia
en la Patagonia argentina. Hermann viajo a establecerse, pero recién tres años
y medio después pudo traer a su familia. Esa familia estaba compuesta por su esposa Ella, su hija
mayor María y las mellizas Ija y Asse. Posteriormente nacerían en Argentina dos
hijos varones más. El 6 de enero de 1923, Ella se embarcó en el puerto de
Hamburgo junto con las niñas, rumbo a la nueva vida. Treinta y un días duró el
viaje hasta Buenos Aires, luego ocho días a lo largo de la costa patagónica
hasta llegar a Puerto Deseado Y tres
días más en auto para arribar finalmente a la estancia del Lago Ghio, en la
zona de Perito Moreno, donde Hermann
Brunswig las esperaba.
María relata la vida en esos años a través de las cartas que su madre
envía a su abuela en Alemania. Las cartas dan cuenta de la vida
cotidiana de una familia alemana en la Patagonia : la casa, sus habitaciones,
los muebles, la alimentación, las tareas, la soledad.
María también relata sus juegos y
experiencias de niña, su recolección de elementos de una época anti glaciar o pre hispánica, los
juegos y las cabalgatas en esos lugares prácticamente inexplorados y de belleza
increible.
Luego
de un año la familia se traslada a otra estancia, Chacayal, en la zona de San Martín de los Andes. En esos bosques de la zona las niñas alemanas
disfrutaron de múltiples juegos y experiencias. Allí tampoco era posible que las niñas
asistieran a la escuela. Tuvieron algunas institutrices pero era muy difícil
conseguir personal estable en la Patagonia deshabitada. Todos los
conocimientos adquiridos y los libros
que les proveían eran en alemán.
En
1929 las niñas son enviadas a Berlín, a casa de sus tios para hacer su bachillerato. Allí viven durante
6 años. Son los inicios del
socialnacionalismo. Ven desaparecer a sus amigas judías . A fines de 1935 María
obtiene su bachillerato y decide regresar a Argentina. No sabe ni una palabra
de español, ya que sus padres jamás le
permitieron hablar nada que se pareciese al castellano.
En
Argentina, María comienza a desempeñarse en distintos trabajos como institutriz
y como secretaria lo que le va permitiendo aprender el español. En Córdoba
conoce a quién será su esposo, Paul Hans Bamberg, un médico judío alemán originario de Berlín
que, había podido salvar su vida junto a su familia escapando a la Argentina.
Alli, María obtiene los títulos de traductora de
alemán e inglés. Se casa a pesar de la oposición
de sus padres , quienes no aceptaban que su hija se casara con un judío. Vivirán
en Argentina, en Córdoba y en San Rafael. La vida en San Rafael, como esposa de
un médico que va abriéndose camino, contada a la manera de María se constituye
en una lectura muy detallada e interesante.
Luego
de tres décadas por nostalgia de
Paul-Hans y por la inestabilidad del país deciden retornar a Berlín en 1963. El
matrimonio había tenido 4 hijos.
Traductora
en Alemania.
En Alemania, deben comenzar una nueva vida,
María ayuda en la consulta y comienza
a
desarrollar una nueva profesión , que la iba a acompañar nada menos que durante
veintiséis años: la traducción.
Nunca
imagino que esta actividad le abriría un sendero nuevo. Maria recibió una propuesta para la traducción de una colección titulada: Latinoamérica,
voces de un continente, junto con un texto de prueba para traducir. Pasó la
prueba y comenzó su nueva tarea. Luego
tradujo obras del inmenso escritor mexicano Carlos Fuentes. Desarrolló con él una
amistad de muchos años , durante los cuales aprendió mucho sobre literatura y cultura latinoamericana .
Con la traducción ganó mejor práctica en el
uso del español, lo cual le sirvió también en otro terreno: en 1975 llegaron a
Berlín los primeros refugiados políticos expulsados de Chile, solicitando
acogida y derecho de permanencia. Amnistía International, donde participaba su
esposo Paul-Hans Bamberg, había conseguido que la República Federal acogiera
anualmente unos mil doscientos refugiados de la dictadura del general Pinochet.
Luego comenzarían a llegar los argentinos.
Y algo más fue posible gracias a la relación
de la traductora María Bamberg con los latinoamericanos: Formó traductores
entre los exiliados.
Luego de su éxito con su libro Allá en la
Patagonia, fue invitada por la familia
propietaria de una de las estancias donde había transcurrido su infancia
a pasar un día allí. María, sus hermanos, hijos y nietos revivieron un día de su
vida en aquella Patagonia que los acogió sesenta años atrás.
María nos deja estas memorias como un regalo
para todos, su historia y su prosa que es un canto a la vida.
Me ha encantado la reseña, si veo el libro en alguna librería voy a intentar hacerme con el, la historia llama mucho la atención y parece uno de esos libros que valen la pena ^^ Saludos!
ResponderEliminarTe adeguro que yo cada tanto vuelvo a leer Alla en la Patagonia y siempre me atrapa. Es la recopilacion de las cartas de su madre a la abuela en Alemania, una sencilla historia familiar muy. amena !!!
EliminarGracias Drina, precisamente es un libro tierno y diferente. Gracias por pasarte por el blog. Saludos.
ResponderEliminar¡Hola Laura! Qué lindo eso de mandar libros por correo, me parece una idea super tierna<3 y más cuando te encontrás con sorpresas como estas. Vos siempre compartiendo libros tan interesantes y ricos en historia. Esos valen oro, realmente. Te dejo un beso enorme :)
ResponderEliminarGracias Aylén, es verdad, he enviado libros hasta a España, para mi siempre es un placer regalar libros ( y que me los regalen, jaja ). Gracias por pasarte por el blog. Un beso !!!!!
ResponderEliminarEstimada Laura.Llegué hasta aquí buscando saber si todavía vive la Sra María Bamberg.Vivo en Patagonia y "consumo" lectura referida a ella,entre las cuales esta "Alla en la Patagonia".Si busco una palabra para definirlo es: delicioso. Se deja saborear pero no parás hasta terminarlo. Debido a tu reseña, buscaré Memorias de dos mundos.Gracias.
ResponderEliminarMe encantaria poder leerlo, bonita reseña. Un beso
ResponderEliminarun libro sensacional ,donde al leerlo uno recorre todos las emociones que llevamos dentro.
ResponderEliminarDonde se consigue!?
ResponderEliminarFijate si lo consigues en Mercado Libre.
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