Yocasta: Reina de Tebas, de quien se han escrito múltiples versiones de su vida o
leyenda. La principal dice que fue separada de su hijo Edipo, cuando este era
un niño. Al crecer Edipo, accidentalmente mata a su padre, y sin saber que
Yocasta es su madre se casa con ella. Sobre el final, se dice que al enterarse Yocasta se suicida,
en otras versiones Edipo la mata y se arranca los ojos. Freud define el
complejo de Edipo como el deseo inconsciente de mantener una relación sexual con el progenitor del sexo opuesto partiendo
de la historia de Yocasta y Edipo.
La madrastra de
Blancanieves: La vanidosa y malvada madrastra de Blancanieves,
no soporta que haya otra mujer más
hermosa que ella. Cuando descubre, a
través de un espejo mágico, que
Blancanieves es la más bella manda a matarla. Se entera que Blancanieves no ha
muerto y entonces, se disfraza de bruja
para llevarle la famosa manzana envenenada. Finalmente Blancanieves se salva y
vive feliz por siempre. De aquellos cuentos tradicionales proviene el mito de
la madrastra bruja y malvada. Hoy con las familias ensambladas, ese concepto
negativo no tiene ningún asidero.
La madre de Ana Frank: Edith Frank ( 1900 - 1945), fue la madre de Ana y Margot Frank, esposa
de Otto Frank. Entrañable familia judía
alemana refugiada en los Países Bajos que fue perseguida por los nazis junto a
otra familia y permanecieron refugiados en una "Casa de atrás". Contuvo a toda su
familia en ese terrible cautiverio, a pesar de que las relaciones en el
encierro resultaron muy dificiles .
Capturados en 1944, Edith murió en Auschwitz, separada de sus hijas, quienes
perecieron en Bergen-Belsen. El diario
de Ana Frank se convirtió en la cara más visible del horror del nazismo.
La mujer de Martín Fierro: Fierro
canta: “ Tuve en mi pago/ Hijos,
hacienda, mujer/ Pero empecé a padecer/ Me echaron a la frontera/ ¡Y que iba a
hallar al volver! / Tan solo hallé la tapera”. En estos versos y en otros,
Martín Fierro comprende y justifica a su china, siente compasión hacia ella por
la vida tan dura que lleva. Puede pensarse que se habla de la mujer como de una
posesión más, como algo que hay que cuidar, lo cual es totalmente lógico en la
idiosincrasia del gaucho. Mujer y madre en la pampa argentina, muy
invisibilizada por el rol del varón.
La Señora Bennet: Orgullo y prejuicio es una de aquellas novelas paradigmáticas, que no
pasan de moda. No es solo una historia de amor, es el retrato de una época
realizado por una escritora que describe desde el mismo escenario donde ocurren
los hechos. La señora Bennet es la esposa quejumbrosa, excitable y maleducada
del señor Bennet, la madre de Elizabeth y sus hermanas. Es frívola y poco
inteligente. Su principal preocupación en la vida es ver a sus hijas bien casadas,
sin importarle con quien, mientras sean ricos . Jane Austen advierte que la
Sra. Bennet es "peligrosamente tonta”. Personaje inolvidable, pero
insoportable, si los hay.
Isabel Allende: En diciembre de 1991, Paula cae enferma de porfiría, su madre Isabel
Allende, al lado de su cama comienza a
escribirle, en un sencillo cuaderno, la historia familiar para que cuando despierte, pueda recuperar su memoria. En aquel desolador
hospital de Madrid, Isabel narra esa historia familiar a la vez que nos relata
el deterioro irreversible de Paula. La lucha dia a dia de Isabel, el traslado
de Paula a California, y el desgarrador final constituyen uno de los libros más
entrañables jamás escritos. Paula se ha convertido en un libro de memorias que
deja el alma al descubierto. Totalmente recomendable para aquellas almas
sensibles.
Ursula Iguarán: Es la famosa esposa de José
Arcadio Buendía, en Cien años de soledad de Gabriel García Márquez. Además de
esposa de José Arcadio, era su prima, por lo que el matrimonio está atravesado por el temor al
presagio que a causa de su parentesco pudieran tener un hijo con cola de
puerco. Es también madre de José Arcadio Buendía (hijo), Aureliano Buendía y
Amaranta Buendía. Incrédula, etérea y
fantasmal, deambula como si caminara adherida a las paredes. Muere entre los ciento quince y los ciento
veintidós años. Representa a la mujer fuerte que saca adelante a su familia.
La madre de Mafalda. La madre de Mafalda se llama Raquel. Del padre nunca se supo el
nombre. Es una jóven y típica ama de
casa de los años '60, que vive un poco atormentada por el remordimiento de no
haber terminado su carrera. Preocupada hasta la histeria por lo que pasa dentro
de su microclima hogareño, se siente esclava de su casa. Cocina, lava, plancha,
hace las compras, y padece el dilema diario de pensar qué va a hacer de
comer. No requiere complicaciones para
ser feliz, y da lecciones de humildad y sacrificio a su pequeña hija inquieta
por las adversidades del Mundo.
La Señora March: Todas las
niñas de mi generación leímos Mujercitas. Aquellas entrañables Meg, Jo, Beth y
Amy acompañaron nuestra infancia. La madre
cuidaba de las chicas y de la
casa. Se involucra en trabajos caritativos e intenta guiar la moral de las
mujercitas, modelando su conducta. El marido, lo que hoy llamaríamos un padre
ausente, se ha empobrecido tras algunos malos negocios. La novela introduce una auténtica revolución
en lo que tiene que ver con los personajes femeninos en la literatura de
aquella época.
Anna Karenina: Anna, esposa de un alto funcionario ruso y madre de un niño se enamora de Vronski, un guapo militar. Al
quedar embarazada de su amante desafía el acatamiento a las convenciones sociales de
la época. La alta sociedad rusa le da la espalda mientras se le estrecha el
cerco que culminará en su suicidio: su marido no quiere concederle el divorcio
y se niega a que vea a su hijo. Desesperada y
abrumada Ana se arroja bajo las
ruedas de un tren. Es uno de los mejores ejemplos de novela psicológica del
siglo XIX. El adulterio, la maternidad, el pecado conforman una tragedia
relatada por Tolstoi de un modo polifacético y complejo. Hace que sea
considerada por muchos, la mejor novela de todos los tiempos.
Me encanto la idea. Si uno sigue buscando madres ilustres en la literatura seguramente la lista sería interminable
ResponderEliminarImpecable como siempre
Hola Guille: Gracias, realmente habría muchas madres, estas fueron mis 10, además de tratar de conformar un ramillete interesante. Saludos.
ResponderEliminarSiempre he admirado a la Señora March, su capacidad de tolerar la diferencia entre sus hijas, y como aceptaba todo unos nervios de acero, la criada también me parecía una ayuda respetuosa.
ResponderEliminarGracias Oliva, realmente la Sra March, es un personaje inolvidable. Me quedo en la retina desde niña. Saludos.
ResponderEliminar¡Madres muy singulares por cierto! Me gustó mucho la selección.
ResponderEliminarGracias, Alfa, un poquito de cada cosa ! Entre muchas otras, elegí esas 10.
ResponderEliminarMuy buena y variada esta selección! Además me hiciste recordar las ganas que tengo de leer Paula de Isabel Allende!!!
ResponderEliminarMe encantó.
Gracias Gime ! Lee Paula, te encantará, prepara pañuelos !
ResponderEliminarHe visto Anna Karenina, la última versión en el cine y me fascinó! no veo la hora de leer el libro, aunque no lo he conseguido.
ResponderEliminarNo he visto la peli, el libro tiene el problema de los nombres, como todos los rusos. Pero es excelente ! Ojalá te guste. Si quieres el libro en digital, me lo pides te lo puedo conseguir.
ResponderEliminarBuenísimo el post! madres de la literatura clásica (y no tanto) que es imposible no recordar♥
ResponderEliminarMe encantó!
Una entrada super entretenida! Me encanto. A la mayoria las oi nombrar, excepto Isabel Allende y Anna Karenina. Excelente seleccion.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias Carla y Cami por pasarse por el blog. Una alegría que les haya gustado. Saludos.
ResponderEliminarHola! Me encanto tu entrada, creo que todas las madres nos dejan algo de lo que aprendemos y las madres literarias son esplendidas para esto, buenas o malas, siempre podemos aprender de ellas.
ResponderEliminarBesos!
Gracias Juli !!!! Un placer que pases por mi blog. Saludos
ResponderEliminarHola Laura, qué grandes personajes femeninos destacaste :) y qué cosas nos enseñan cada una, la verdad, muy buen post. De las que más me gustan es Isabel Allende, creo que un día de éstos me voy a leer todos sus libros :) ¡besos!
ResponderEliminarGracias Aylén, si buscas en el blog tengo un entrada sobre Isabel Allende.Me alegra que te haya gustado. Saludos.
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